Para poner fin a las polémicas sobre los circulos extraños en cultivos de maíz, trigo, etc; una explicación de por más racional de la situación que hasta los más destacados científicos pasaron por alto. Actualmente se discuten las consecuencias culturales que este descubrimiento pueda ocasionar en la sociedad... Algunos comparan su trascendencia con el impacto causado por la Teoría Heliocéntrica de Copérnico.
Jueves 17 de Junio de 201018:07 | No se explican cómo el cantante está vivo todavía, después de una vida de excesos. Destinarán 30.000 euros para investigar su genoma.
MADRID.- Parece irrompible. Tiene 62 años y ha tenido una existencia repleta de excesos. Hace poco reconoció que pasó borracho 40 años de su vida. Pese a todo sigue cantando y está por sacar un nuevo álbum.
Por todo ello, Ozzy Osbourne ahora es también objeto de investigación y un grupo de científicos cuenta con un presupuesto de 30.000 euros para investigarlo.
Según informó ayer el diario El País los investigadores se concentrarán en el genoma del cantante para intentar averiguar cómo es que, tras 40 años de abusos, está aún en pie.
"Secuenciar y analizar individuos con historias médicas extremas constituye un valor científico en potencia", dijo Nathan Pearson, director de la investigación Knome, según consigna el periódico español, citado por el diario La Nación.
Recientemente, Ozzy le contó a un diario alemán que no sabe leer bien porque sufre dislexia. "Me cuesta mucho incluso leer algunas cuantas líneas", reveló, aunque aseguró que pese a ello posee una buena biblioteca. "Tengo muchas primeras ediciones, de las que estoy orgulloso. De Charles Dickens o William Shakespeare, por ejemplo."
Y acá está, después de tanto tiempo, el cuento que escribí después de leer el de Cortázar...
Algo aburrido, algo somnoliento, agarró la guitarra y se puso a rasguear un par de sus habituales canciones. De vez en cuando, iba a ver qué estaba haciendo su hermanita, pues ella y él eran los únicos en el departamento en ese momento. Sus padres trabajaban y su otra hermana estaba en clases de Danza. No volvería sino al cabo de unas cuantas horas.
Suspiró. Fue al balcón y sacó del tendedero un pantalón corto -porque empezaba a hacerle calor-, mientras aprovechó para mirar brevemente los autos que pasaban por la esquina. "Siempre lo mismo" pensó. Es que ya desde hacia varias semanas, el panorama no había cambiado en absoluto. Las mismas chatarras se paseaban una y otra vez por las mismas calles, escuchando música a todo lo que da y haciendo caso omiso a las bocinas de los malhumorados colectivos y a las protestas de los peatones, apurados y sin rumbo fijo, usando extraños atuendos y rogando por un poco de atención.
Sin embargo, esta monotonía le despertó desesos de salir a tomar un poco de aire fresco; quizás ir a hacer algo por ahí con sus amigos del colegio. Hizo las llamadas necesarias y todo quedó arreglado: en una hora, se verían con los demás en la plaza, la cual estaba a 2 cuadras de donde vivía. Irían a comer algo y después partirían hacia una fiesta por el cumpleaños de la hermana de uno de sus compañeros.
Se bañó, se cambió y alistó a la chiquita para dejarla en el local de la abuela, a media cuadra de allí, puesto que ella aun no tenía la edad suficiente como para quedarse sola en su casa.
Luego, cuando iba a agarrar el celular para salir, vio la guitarra tendida en su cama y no se resistió. Quiso terminar de componer la canción que había empezado a escribir días atrás. Era bastante buena. Le recordaba a las vacaciones de invierno, los domingos en su estancia del campo, las idas a la cancha de su equipo favorito de fútbol, y muchos otros ratos felices de su infancia.
También se percató del fin de semana largo que le esperaba, dado que, al día siguiente, desinfectarían su escuela y no se dictarían clases. Esto lo relajó definitivamente.
Sonó un fuerte golpe de una puerta de afuera de su hogar, lo que lo sacó un poco de su ensimismamiento. Aquel portazo le hizo venir a la memoria las palabras de la vecina de la mañana pasada. Ella le había comentado, mientras aguardaban el ascensor, que una pandilla de vándalos merodeaba los edificios y casas de Barrio Norte, y que se habían reportado numerosos casos de robo en departamentos céntricos de la zona. Él no le había dado demasiada importancia, en parte, ya que la vecina no le agradaba mucho y pensaba que siempre lo exageraba todo. Era de esas señoras qu hablaban con su mascota (como si el pobre animal entendiése algo), sumida en la soledad y olvidada por sus 2 hijos mayores.
En fin, la modorra iba ganándole poco a poco. Se desperezó y guardó la guitarra en la funda que estaba en el living. Entró por última vez a su cuarto para sacar algo de dinero y reunirse de una vez con los muchachos. En eso, oyó un murmullo en la puerta de adelante. "Raro", se dijo a sí mismo.
Tal vez la señora tenía razón acerca de aquellos tipos. Tal vez debería cerrar la puerta con llave, o bueno, eso debería haber hecho, antes de ver asomar la cabeza del extraño hombre por su pieza apuntándole con algo que tenía en la mano directo a su cabeza...
Tranquilo en mi casa, mientras me tomaba un mate por el frío de porquería que hacía afuera, veía series de warner y disfrutaba del comienzo del fin de semana. En lo que me preparaba unas tostadas, sonó el teléfono...
No entendí nada, era una mezcla entre llantos y lamentos que no parecían ser humanos. Seguí escuchando, muy interesado y confiado en establecer algún contacto con la criatura...
Yo: para hermano que no te entiendo una palabra!! Alguien: aaarrraraggrgagh!!! boludo me quiero hacer añicos! perdi todo mi dinero en el poker!! sniff sniff! Yo: uhh que bajon cuando pasa eso, a mi tamb--- Alguien: para chango! que no ve que estoy hablando!? Gloria me hace lo mismo todas las noches por eso ya no la llevo al abasto!! ESCUCHÁ... (se queda colgado y no emite sonido alguno) Yo: tranquiiilo loco, tratemos de hablar como personas civilizadas... estas?- contesté decepcionado por darme cuenta de que era sólo un retardado que se había equivocado de número... decidí llamarlo Pichón.
Pichón: sí boludo, es que yo soy un poquito especial, aparte soy muy pequeño para hablar bien... Yo: ah si? pero por lo que escucho no sos muy chico... Pichón: eso le digo yo a mi papi, pero él no me cree, y me sigue diciendo que soy el mejor amigo del hombre, es una cosa muy boluda!!! MUY BOLUDAA!! (se desconfigura y empieza a gritar). Yo: bueno, pero--- Pichón: y encima sabes que mas? CAGO CANCUN!!!! ARRRRARHGG!! ARRGAGRHGHG!! LA MONA BOLUDOOO!!! NOO!! ARRRGGGHGHGAGRGRG!!
y si, el otario se ponía otra vez a llorar y me estaba empezando a desesperar...
Yo: bueno, pero tranquilizate un poco, no es para tanto despues de todo, de seguro te vas a otro lado con tus amigos! Pichón: esnif esnif!! si si esta bien ya estoy calmado, es que hoy no pude ir al crillón, y me quitaron la tarjeta de miembro oficial. Yo: por que? -ya me estaba arrepintiendo de haber preguntado... Pichón: PORQUE!? QUE SOS PELOTUDO VOS?? me dejaron vacio el bolsillo en el poker!! SKAI ME GANO EL DINERO Y SE FUE CON LAS DOS RUBIAS DESPAMPANANTES QUE YO HABIA ALQUILADO POR EL PERIODICO!!! me rompieron el corazon chango!! ya no se que hacer!! arararrarar.ra.r....
Siguió croando y ladrando un buen rato, hasta que interrumpí...
Yo: bueno bueno, me estoy durmiendo ya, queres contarme algo mas? Pichón: sí, mira... vos que vendes helados, yo tengo una cachorrita que se lastimo la pezuña!! como la curo? Yo: emmm si tiene pezuña, no es un perro... Pichón: Y QUE SABE VO!!! QUE YA LA VISTE!! NO! NO LA VISTE!!! SOS MUY BOLUDO VOS!! NO SOS UN BUEN AMIGO! Yo: pero-- Pichón: no sos un buen amigo! Yo: pero te lo digo porqu--- Pichón: no sos un buen amigo! Yo: eeee si te lo digo para--- Pichón: no sos un buen amigo!
Ya había aguantado demasiado...
Yo: uhhhh andate a la concha de tu madre!! manga de deforme!!
Corté. Me fui a dormir caliente y nunca más supe de ESO que me llamó.
Esta es la cara que recreé, es a lo primero que me sonó la voz de aquel tipo
En fin, yo me imaginaba otra llamada... tal vez con este video entiendan de lo que hablo.
Pronto:
Una interesante historia que escribí inspirado en un cuento de Cortázar, mientras perdía el tiempo en mi pieza.
"La noche boca arriba" se llama, se los recomiendo.
